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¿Qué factores determinan la autonomía de un coche eléctrico?

Monica Gomez - ENERO 8, 2024 - Coches eléctricos

Autonomía de un coche eléctrico

Cuando hablamos de autonomía de un coche eléctrico, nos referimos a la distancia máxima que el vehículo puede recorrer con una carga completa de su batería antes de necesitar recargarse. La autonomía es una medida clave para evaluar la practicidad y conveniencia de un coche eléctrico, ya que determina cuánto tiempo puede estar en la carretera antes de requerir una parada para recargar.

Para mejorar la autonomía de los coches eléctricos, los fabricantes trabajan en el desarrollo de baterías más eficientes y en la mejora de la gestión de la energía del vehículo. Además, la infraestructura de carga también juega un papel crucial para hacer que los coches eléctricos sean más prácticos, ya que una red de estaciones de carga rápida facilita viajes más largos y reduce la preocupación por la autonomía limitada.

Además de los factores propios del diseño y de la manufactura de fábrica, la carga de un coche eléctrico depende de otros factores externos que no podemos comprobar. Sabiendo esto, la pregunta es: ¿cuánto puedo recorrer con una sola carga? La respuesta no es única, pues depende de diversos factores. ¡Te lo contamos a continuación! 

¿Se puede medir la autonomía de un coche eléctrico? 

Para responder esta pregunta, es fundamental considerar las condiciones y el ciclo de homologación que se han utilizado como referencia para determinar dicha autonomía.

Uno de los ciclos de homologación más comunes es el NCDE, muy utilizado en Europa. Este ciclo consiste en una prueba de consumo y emisiones realizada en un entorno cerrado, con el vehículo en rodillos que simulan resistencias al giro equivalentes a la aerodinámica y masa del automóvil. La prueba se realiza a temperaturas controladas, sin carga adicional en el vehículo y con elementos eléctricos apagados. 

A pesar de su estandarización, esta medición no refleja situaciones de arranque más brusco ni condiciones de conducción realistas, y algunos fabricantes recurren a tácticas como el aumento de presión de los neumáticos o el uso de neumáticos de baja resistencia a la rodadura para optimizar resultados.

Otro ciclo relevante desde 2017 es el WLTP (Worldwide Harmonised Light Test Procedure), diseñado con el propósito de unificar las mediciones de consumo de combustible y autonomía en vehículos, incluyendo eléctricos, a nivel mundial. Este ciclo impone mediciones más estrictas y se realiza a velocidades más cercanas a las condiciones de conducción reales, lo que contribuye a que la autonomía obtenida sea más próxima a la realidad.

Factores que determinan la autonomía de un coche eléctrico

La autonomía de un coche eléctrico puede variar significativamente según el modelo, la capacidad de la batería, las condiciones de conducción, la velocidad y el uso de dispositivos eléctricos a bordo. Es común expresar la autonomía en términos de kilómetros o millas, y los fabricantes de automóviles suelen proporcionar estimaciones basadas en condiciones de conducción estándar.

1) Tipos de motor y sus características

En la propulsión de vehículos eléctricos, se emplean tres variantes de motores. Estos se clasifican como motores síncronos de reluctancia, motores síncronos de imanes permanentes y motores eléctricos de inducción. 

Los motores más eficientes, especialmente a bajas revoluciones, son los motores síncronos de imanes permanentes. Estos motores cuentan con un rotor que incorpora imanes permanentes, los cuales generan un campo magnético. Dado que este campo no requiere ser creado mediante una bobina, la eficiencia del motor se ve beneficiada. 

Además, presentan una mayor densidad de potencia, lo que les permite generar más potencia por unidad de volumen. Asimismo, son capaces de operar en un rango de velocidades más amplio, lo que resulta en menores pérdidas de eficiencia tanto a velocidades muy altas como muy bajas.

2) El peso de tu coche

El consumo de energía de un vehículo está directamente relacionado con su peso, según lo establece la segunda Ley de Newton, como bien recordamos de las lecciones de física. A medida que aumenta la masa de un automóvil, se incrementa la fuerza necesaria para acelerarlo.

Por otro lado, un automóvil más pesado presenta mayor inercia, lo que dificulta su capacidad de frenado y requiere más energía para acelerar. Este aumento de masa también contribuye a una mayor resistencia al aire, aumentando la energía necesaria para desplazar el vehículo a través del mismo.

En resumen, la relación entre el tamaño y peso de un automóvil y su autonomía es clara: a mayor tamaño y peso, menor será la autonomía del vehículo debido al aumento en el consumo de energía necesario para superar estas resistencias físicas.

3) Las condiciones climáticas y el estado de la carretera

En términos generales, los vehículos eléctricos experimentan una disminución en su autonomía cuando operan en condiciones de frío en comparación con condiciones más cálidas. Esto se debe a que las baterías tienden a funcionar de manera menos eficiente en entornos fríos.

Las precipitaciones, ya sea en forma de lluvia o nieve, generan un aumento en la resistencia aerodinámica, un factor que conocemos por reducir la autonomía de los vehículos eléctricos. Además, el viento puede ser tanto un aliado como un adversario para la autonomía, dependiendo de su dirección y fuerza. En función de estos factores, el viento puede proporcionar impulso al vehículo en la dirección deseada o actuar en su contra, generando resistencia adicional.

Además, el estado de las carreteras también importa. Las elevaciones pronunciadas demandan una mayor cantidad de energía para superarse. En el caso de carreteras con curvas, se necesita más energía para realizar aceleraciones y desaceleraciones. Además, en carreteras en mal estado, la fricción adicional puede ser un factor que reduzca la autonomía del vehículo.

4) Tu forma de conducir

Así como lo lees: tu forma de conducir influye de manera significativa en la autonomía de un coche eléctrico. En términos generales, los coches eléctricos tienden a tener una menor autonomía cuando se adopta un estilo de conducción agresivo, caracterizado por aceleraciones y frenazos bruscos. Este mayor consumo de energía durante las fases de aceleración y frenado explica la reducción en la autonomía.

Existen algunas pautas que los conductores pueden seguir para mejorar la autonomía de sus coches eléctricos:

  • Adoptar un estilo de conducción suave y constante.
  • Evitar aceleraciones y frenazos bruscos.
  • Anticipar las frenadas y aprovechar el freno regenerativo cuando esté disponible.
  • Utilizar el modo de conducción eco.
  • Mantener la presión de los neumáticos de acuerdo con las recomendaciones del fabricante.
  • Evitar conducir en las horas más cálidas para reducir el uso del sistema de climatización interior del vehículo.

5) El tipo de neumáticos

Los neumáticos también influyen en el consumo de un coche. Los modelos estrechos y altos, con mayor presión, menor resistencia a la rodadura y una aerodinámica mejor, tienden a ser los menos consumidores de energía. Esta es la razón por la cual existen neumáticos específicos diseñados exclusivamente para coches eléctricos. No sorprende que aproximadamente el 26% del consumo total de un vehículo eléctrico esté vinculado a los neumáticos.

¿Puede haber diferencias entre la autonomía de fábrica y la autonomía real de mi coche?

La autonomía real de un coche eléctrico puede variar con respecto a la autonomía indicada por el fabricante. La razón principal radica en que los fabricantes suelen proporcionar la autonomía de sus modelos en condiciones ideales de conducción. Sin embargo, tal y como detallado anteriormente, la autonomía real está sujeta a una serie de factores que escapan al control del fabricante, como el estilo de conducción, las condiciones climáticas y el tipo de carretera.

Adicionalmente, las baterías de los coches eléctricos experimentan degradación con el tiempo, lo que conlleva una disminución progresiva en la autonomía a medida que los años de uso avanzan.

Consideraciones finales sobre la autonomía de los coches eléctricos

En resumen, la autonomía de tu coche eléctrico no es un valor estático; está sujeta a diversos factores. No obstante, comprender cómo estos factores influyen te permite optimizar tu autonomía y disfrutar plenamente de la experiencia de conducción eléctrica.

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